Los hermanos
15.10.2018
La contención familiar de un niño con una condición determinada no debe quedar circunscrita a los padres, debe extenderse siempre a los hermanos. Diversos estudios demuestran que el estrés de los hermanos es elevadísimo, tanto como el de los padres.
Son guerreros silenciosos. Más de una vez puedes verlos también en las salas de espera, leyendo, realizando tareas, jugando o simplemente allí acompañando a su hermano en esa sesión de fono o psicología...una de tantas a la semana.
Los ves incluso dejando sus tareas y juegos de lado para estar junto a su hermano, los ves incluso dejando de ser niños para ser en algunos casos hasta co-terapeutas.
Otras tantas veces estos niños toman responsabilidades y roles variados según la necesidad de sus hermanos. Los ayudan a diario. Los cuidan a veces así mamá o papá pueden darse por fin una ducha o simplemente tomar un café en la cocina. Los contienen siempre.
Se preguntan y nos preguntan sobre su hermano....¿por qué no me habla?¿ cuándo hablara?¿ por qué no se queda quieto o se comporta así?¿ cuándo jugara conmigo o por qué no juega conmigo?
Son muchas las circunstancias que puede vivir y sentir el hermano de un niño con una condición, comenzando por la frustración persistente ante sus intentos de iniciar juegos compartidos, que puede llegar al abatimiento, abandono, tristeza o centrar su interés en otra persona. Pueden aparecer los enfados y la incomprensión de cuando le rompe sus pertenencias o sus juguetes e incluso dudar de su valor e importancia por el tiempo que le dedican sus padres que parecen siempre más preocupados en su hermano.
La vida es hermosa y tiempo menos o tiempo más ellos se entenderán. Tendrán esa complicidad y ese "idioma" de hermanos que hará de su relación única y especial. Un amor incondicional.
Cuando los padres recibimos un diagnostico, los hermanos también.
Son importantes estas recomendaciones:
1-Hablar con ellos sobre su hermano. De un modo sencillo, sin abrumarlos, sin asustarlos. Explicar lo que sucede no es fácil. Tómate tu tiempo. Elige el momento. Habrá muchas preguntas. Contesta las que puedas. Enseñarles que todos somos diferentes.
2-Hazlo participe de las recomendaciones y terapias pero no lo sobrecargues, implícalo en aspectos necesarios para el cuidado o entendimiento de su hermano pero sin generarle una carga.
3- Los hermanos mayores suelen pasar más tiempo desempeñando funciones de atención y cuidados que los demás hermanos. Es importante no cargar a estos hermanos de responsabilidades, que en muchos casos no les pertenecen, y que pueden llegar a atravesar una etapa difícil para alcanzar la independencia y dificultades en el desarrollo de la esfera social.
4-No te olvides que es un niño. No olvides que es un adolescente. Sus actividades deben ser acordes a su edad.
5-Hay responsabilidades que solo son de mamá y papá. No permitir que los niños o adolescentes tomen decisiones o acciones que corresponden a los adultos.
6- Háblale del Bullying. Como prevenirlo y como no ser parte.
7- Tómate tu tiempo para pasar tiempo con el o ella, un espacio de ustedes.
8-Permíte que desarrolle sus actividades de manera independiente.
9- Los hermanos suelen sentirse desplazados o desatendidos con frecuencia. Escuchálo. Abrázalo. Dile que lo amas.
10- No te olvides de ellos. No te olvides de ti.